Nuestra Historia

La historia de la Mutual contada en detalle por uno de los socio fundadores, Jorge Diez.

La idea de formar una “mutual” o “cooperativa” surgió a partir de un grupo de familias (Romero, Ramos, Baruff  y Diez) que se reunían los fines de semana en el año 1995. Se optó por enmarcar el proyecto en la figura de Mutual por ser esta la que se adaptaba mejor a la idea de la familias fundadoras.

En la mutual los padres cuentan con el derecho a que sus hijos reciban los servicios educativos, pero no son dueños de parte alguna de su patrimonio. Esto quedó plasmado en la definición de Socios Activos, que son quienes pueden formar parte de su Consejo Directivo y su Junta Fiscalizadora. Los socios activos deben ser papás con hijos en la escuela.

Se investigó en la historia de la ciudad los distintos nombres que se utilizaban para designar a nuestro “pueblo” antes de llamarse Cipolletti. Entre éstos se encontró el de “Estación Limay”, que era como se lo conocía por ser la punta de riel, ya que el ferrocarril que partía desde Bahía Blanca terminaba acá cuando no estaba construido el puente ferroviario sobre el río Neuquén.

Se redactó el estatuto, el acta fundacional y se realizaron todos los trámites para su inscripción y habilitación.

Ya se tenía todo lo necesario, sobre todo los papás quienes se iban sumando con entusiasmo y muchos de ellos colaborando en las tareas.

Se decidió empezar a funcionar en marzo del ´96. Los tiempos se acortaban, y se fijó la fecha de la Asamblea Fundacional para el 12 de octubre de 1995, en la Sala Benavente de la Biblioteca Rivadavia.

Sabíamos del apoyo de parte de la comunidad a nuestra iniciativa, pero ese 12 de Octubre, realmente quedamos sorprendidos por la concurrencia. No sólo fueron papás interesados por la educación de sus hijos, fueron también representantes de otras instituciones como la que estábamos creando, a apoyarnos. Un caso que recuerdo fue el de la Mutual Pablo Bessón, en cuyas aulas dictamos los cursos de nivelación para el ingreso.

Las autoridades de la Asamblea, los fundadores y las autoridades designadas para conducir la Mutual, constan en el Acta que acompaña el Estatuto de la Mutual.

Por una parte estaba la inscripción de la Mutual en el Instituto de Cooperativas y Mutuales (en ese momento denominado INACyM), por otro la inscripción y reconocimiento de nuestra escuela ante el Consejo Provincial de Educación de la Provincia, la diagramación e implementación de los cursos de nivelación, la selección del cuerpo directivo y docentes, el alquiler y adaptación del edificio para que funcionara la escuela. Después de varios viajes a Buenos Aires al INACyM, y las gestiones del (entonces) Diputado Nacional  Jorge Ocampos, logramos que nos dieran la inscripción definitiva.

La demanda hizo que extendiéramos la inscripción a 2° y 3° año del secundario. No recuerdo con precisión, pero para el inicio teníamos ¡cerca de 150 chicos!

Con el impulso del secundario, se tomó la decisión de crear el nivel inicial y el primario. En el año 1997 empezó a funcionar en la calle Yrigoyen, casi Brentana. Cada año, tanto en el secundario como en la primaria, se iba agregando un año. Fue necesario dejar el lugar donde funcionaba la Administración de la Mutual en la Calle Brentana, a nuevas aulas del secundario. A su vez hacían falta aulas para la primaria. Alquilamos otro inmueble, el de la calle Brentana casi Yrigoyen.

Después se pasó al edificio de la calle Belgrano con la primaria, al de la calle Brentana con el Jardín y de ahí en más la historia es más reciente.

Hoy estamos en un edificio construido especialmente para que funcione una escuela, donde están juntos todos los niveles contando con un gran espacio libre. Ese fue siempre nuestro sueño desde el inicio: ¡todos los ciclos juntos!

En el año 2000 egresó la primera promoción que cursó íntegramente el ciclo medio en nuestra institución, en el año 2006 egresaron del primario los que empezaron en la salita de 3 años y cursaron todos los años en Estación Limay. En el 2011 egresó la primera promoción completa del Limay, desde salita de 3 años.

Mi deseo es hacerles comprender a los papás y a los chicos, el tipo de institución a la que concurren, que se basa fundamentalmente en la SOLIDARIDAD. Muchos creen que es una “escuela privada”, donde el compromiso se limita a pagar la cuota. En nuestra institución no es así, el pago de la cuota es sólo una parte de las obligaciones que asumimos al ingresar, porque debemos participar en la vida diaria de la Mutual, en acompañar las decisiones, en formar y participar de los consejos directivos, juntas fiscalizadoras, etc.

A todos quienes nos confiaron parte de la educación de sus hijos, a las directivos de niveles, a los profesores y maestros, a los porteros y personal de maestranza en general y en particular a Erna y Juan que comenzaron con nosotros en el secundario, a Bety que se incorporó a nivel inicial al año siguiente, a todos ellos mi agradecimiento. Simplemente, GRACIAS.

Hay dos personas que, en mi modesta opinión, fueron los motores del proyecto, por el compromiso, el tiempo y energía que le dedicaron: CARLOS BARUF y ALBERTO LARREGUY. El resto acompañamos, pero ellos fueron los que día a día y durante varios años, le dedicaron muchas horas a la Mutual.

¡Me enorgullece haber participado!